UN PUEBLO PARA SABOREAR

La GASTRONOMÍA de Brunete resalta la tradicional vinculación a la tierra castellana. Por ello, los ASADOS y los PLATOS DE CUCHARA son protagonistas de la cocina local. Pero si hay un producto estrella es el GARBANZO MADRILEÑO, cultivado desde tiempos ancestrales en Brunete y su entorno. Es el garbanzo con el que tradicionalmente se ha elaborado el plato más popular de la gastronomía madrileña: el cocido.

El garbanzo madrileño destaca por su tamaño pequeño y color anaranjado, que le lleva a parecerse en su aspecto externo al pedrosillano, si bien sus características tras la cocción son sustancialmente diferentes. El garbanzo madrileño aumenta más del doble su tamaño tras la cocción, no pierde su piel en el proceso y presenta una untuosidad mantecosa y blanquecina en su interior, que le convierte en el ideal para la elaboración del tradicional COCIDO MADRILEÑO por su tersura y sabrosas propiedades. Los restaurantes de Brunete ofrecen más de mil cocidos a la semana. Otro plato tradicional basado en el garbanzo de la tierra es el POTAJE CON COLLEJAS
Pero la rica materia prima de los campos de Brunete no se agota aquí. Somos tierra de caza menor y por ello el CONEJO, la LIEBRE o la PERDIZ -a menudo elaborada con judías-, son alternativas muy sabrosas y nada desdeñables. Todavía hay varios agricultores que siguen elaborando artesanalmente el vino de la tierra y las huertas tradicionales ayudan a que todo el año tengamos productos frescos de primera calidad.

La REPOSTERÍA se convirtió durante siglos en el complemento especial para cualquier celebración popular. Cada festividad del año suele tener asociada un postre típico que a día de hoy siguen ofreciendo tahonas tradicionales cuando llega la época. Destacan las tortas de anís, los bollos de manteca, la rosca de San Sebastián o el hornazo.